Un mundo (mejor) con coches autónomos
Se estima que si se reemplazaran a todos los vehículos tradicionales, la emisión de gases de efecto invernadero se reduciría en 90%.
Si todos los automóviles a gasoil y a nafta fueran reemplazados por flotas de taxis autónomos y eléctricos, el mundo vería una reducción del 90% en las emisiones de gases de efecto invernadero, según cálculos de los investigadores del Laboratorio Nacional de Lawrence Berkeley en California, en el estudio publicado en la revista Nature Climate Change.
Una flota que sustituya al 15% de los vehículos particulares de una población determinada podría servir a la misma si se programa correctamente, estimó Jeff Greenblatt, coautor del estudio.
El estudio indica que las emisiones de gases de efecto invernadero (por kilómetro recorrido) de un vehículo eléctrico con sistema de auto-conducción serían entre el 63% y el 82% menos que un vehículo híbrido y el 90% menos que un vehículo con motor de combustibles fósiles.
Aunque un coche sin conductor y eléctrico costaría US$ 150.000, los investigadores recuerdan que, lo que gastaría uno normal en combustible, se menos de cinco años.
Google presentó su coche autónomo el año pasado y va adelante en la carrera, con algunos autos ya circulando en Mountain View, California, como parte de su experimentación. Este vehículo identifica obstáculos e incluso frena cuando hay pozos, pero no puede funcionar sin internet ni en días de mucha lluvia o nieve. El objetivo es lanzar los primeros al mercado en cinco años.
Aunque un coche sin conductor y eléctrico costaría US$ 150.000, los investigadores recuerdan que, lo que gastaría uno normal en combustible, se menos de cinco años.
Google presentó su coche autónomo el año pasado y va adelante en la carrera, con algunos autos ya circulando en Mountain View, California, como parte de su experimentación. Este vehículo identifica obstáculos e incluso frena cuando hay pozos, pero no puede funcionar sin internet ni en días de mucha lluvia o nieve. El objetivo es lanzar los primeros al mercado en cinco años.
Este artículo fue publicado en El Observador
0 comentarios:
Publicar un comentario